Evaluación de alianzas y convenios: datos para elegir mejor
Las alianzas son fundamentales para el trabajo de muchas ONGs. Permiten ampliar alcance, acceder a recursos y generar mayor impacto. Pero no todas las alianzas son iguales, ni todas aportan lo que prometen.
Este artículo muestra cómo usar datos para evaluar objetivamente cada convenio o alianza, y así decidir con quién continuar, qué ajustar y qué evitar a futuro.
1. ¿Por qué evaluar las alianzas?
Porque muchas veces las alianzas se mantienen por inercia, relaciones personales o compromisos pasados, sin preguntarse:
- ¿Qué resultados concretos ha generado esta colaboración?
- ¿Estamos invirtiendo más de lo que recibimos?
- ¿Se cumplieron los objetivos acordados?
- ¿Cuál fue el costo-beneficio real?
Sin datos claros, se corre el riesgo de seguir atados a alianzas que no aportan valor real.
2. Qué variables analizar
Para evaluar de forma objetiva, puedes crear una matriz con indicadores como:
Alianza | Aporte recibido | Recursos invertidos | Resultados obtenidos | Nivel de colaboración | Recomendación final |
---|---|---|---|---|---|
Fundación X | Financiamiento puntual | Bajo | Alto impacto | Fluida | Continuar y reforzar |
Red Y | Difusión de actividades | Alta dedicación | Pocos resultados | Débil | Reevaluar o cerrar |
Indicadores que puedes incluir:
- Fondos recibidos vs. tiempo invertido
- Participación efectiva en actividades conjuntas
- Cumplimiento de compromisos mutuos
- Satisfacción del equipo con la colaboración
- Visibilidad o posicionamiento logrado
3. Herramientas simples para hacerlo
- Google Sheets o Excel con filtros y puntuaciones
- Encuestas internas al equipo sobre cada alianza
- Registro cronológico de entregables, reuniones y logros
- Dashboards comparativos si trabajas con muchas alianzas a la vez
4. Ejemplo concreto
Una ONG de medioambiente tenía convenios con 6 instituciones. Tras analizar 12 meses de colaboración, detectó que 2 de ellas exigían mucho esfuerzo logístico pero aportaban pocos resultados medibles. Decidieron enfocar sus recursos en 3 alianzas más productivas, mejorando así su eficiencia operativa y su impacto.
5. Qué hacer después del análisis
- Reforzar alianzas que funcionan con propuestas de mayor colaboración
- Redefinir acuerdos débiles, ajustando expectativas y roles
- Cerrar vínculos improductivos de forma clara y respetuosa
- Documentar todo para futuras negociaciones
Conclusión
No todas las alianzas suman. Evaluarlas con datos te permite dejar de actuar por compromiso o intuición, y empezar a construir relaciones estratégicas basadas en evidencia.
Una ONG que sabe con quién y por qué se asocia, es una organización más efectiva, transparente y profesional.